Situada en uno de los pueblos más importantes del Val de Boí, Sant Joan de Boí es la iglesia que conserva más elementos arquitectónicos del primer momento constructivo que se produce en la Vall de Boí en el siglo XI. Es una iglesia de planta basilical, con cubierta de madera a dos aguas y tres naves que terminan en ábsides semicirculares, excepto el ábside central modificado a forma trapezoidal con posterioridad.
En 1931 fue declarada Monumento Histórico-Artístico, el año 1991 Bien de Interés Cultural y en el 2000 dentro del conjunto de Iglesias románicas catalanas del Valle de Bohí, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Las naves de la iglesia están separadas por arcos de medio punto apoyados en pilares de planta circular y rectangular. Corresponde al estilo románico lombardo.
Posee una torre campanario, adosado a la fachada sur de forma cuadrada y modificada en el último piso, tras sufrir un importante incendio en el siglo XIII, esta se vio gravemente afectada perdiendo los tres cuerpos superiores, solo se conservan los tres cuerpos inferiores que presentan la misma disposición de las demás torres del valle.
Sus
lienzos, tanto en el interior como en el exterior, estuvieron decorados con
pinturas románicas al fresco obra del llamado maestro de Bohí.
Exteriormente se conservan, situadas en la fachada norte de la iglesia, alrededor del arco de medio punto de la puerta, las pintura representaban una teofanía.
En la parte central podemos ver una forma circular, sostenida por cuatro ángeles, que habría contenido la imagen de un crismón. A un lado de esta escena había representado un santo con un libro en la mano, y otros tres personajes que contemplan la visión central. Una cenefa con motivos geométricos enmarca todo el conjunto.
A cada lado de la puerta, debajo de las pinturas murales, también se conservaron unos grafitis de época medieval, -siglos XIII y XIV- donde se distinguen diversas escenas de temática castrenses, con torres, personajes tocando trompas, caballos y estrellas.
En la parte superior del panel derecho se realizó el único grafiti epigráfico del conjunto. Se trata de un texto breve que podemos datar en torno al año 1200 debido a que la grafía utilizada se encuentra en un momento de transición entre el final de la letra carolina y el comienzo de la gótica, por lo que nada tiene que ver con las dataciones que, hasta el momento, lo situaban en la primera mitad del siglo XIV. Aunque con algunas reservas debido a su estado de conservación, lo transcribimos como “Oretis pro Garcia, cuius erat etas ad deni ter a[nnos]” [Que recéis por García, cuya edad era de treinta años].
En los grandes centros religiosos, “a finales del siglo XII y, especialmente, en el siglo XIII”, existen una serie de inscripciones necrológicas que parecen estar estrechamente ligadas “al culto de los muertos y a las obligaciones que la comunidad contraía de orar por sus familiares y bienhechores” y que derivan de los libros obituarios. El grafiti de san Juan de Bohí parece encontrar su razón de ser en este contexto de búsqueda de salvación del alma. Es posible que su autor fuese un clérigo con un buen conocimiento del latín, a tenor de los vocablos empleados, y el hecho de estar colocado en la puerta de entrada a la iglesia a una altura visible para cualquier persona podría indicar que se trataba de un mensaje destinado a los fieles que accedían al interior similar a los ya vistos en otras iglesias medievales peninsulares como en PEÑALBA DE SANTIAGO (enlace a nuestra publicación).PEÑALBA DE SANTIAGO, León. |
Debido a que los grafiti fueron practicados sobre las propias pinturas de la puerta norte, la datación de estas es la que nos proporciona una fecha post quem para ellos. Así, mientras que las pinturas del interior de iglesia fueron realizadas en una única campaña en torno al año 1100, las del exterior se efectuaron con posterioridad, pero siempre antes del año 1140.
Las pinturas y el revoque estaban protegidos por un pórtico que fue derribado en época moderna. Fue en este momento cuando se dejó hacer uso del acceso lateral y se abrió la puerta actual a los pies de la iglesia.
Al traspasar la puerta de este muro oeste, descubrimos la pintura del dragón de las siete cabezas, la bestia apocalíptica, imagen que formaba parte del Juicio Final, que debía ocupar todo el muro occidental. La representación del inferno y del paraíso actuaba ante los fieles como recordatorio de lo que les esperaba en el más allá, dependiendo de su comportamiento en la Tierra.
Delante
de la pintura de la bestia apocalíptica, encontramos el recipiente de agua
bendita o acetre. Su ubicación muestra como la pintura y la arquitectura van de
la mano para transmitir el mismo mensaje: la salvación del alma mediante el
bautismo ante la advertencia del inferno.
Conserva
otra pila románica enterrada en medio de la nave lateral sur,
es un depósito de diezmos de boca circular con rebaje para ajustar su tapadera
su función era la de guardar el aceite que se utilizaba para iluminar la
iglesia, solían tener una tapa de madera que en este caso, no se ha conservado.
Preside el altar central una imagen de San Juan Bautista, titular del templo, que fue el primero en identificar a Jesús como “el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.”
Las pinturas murales originarias, fueron arrancadas entre 1919 y 1923 para ser trasladadas para su conservación al Museu Nacional d’Art de Catalunya. En la actualidad se han hecho copias de las mismas en el interior y en el exterior. En la nave lateral de la epístola se han colocado una serie de fotografías y explicaciones del momento de la Misión Arqueológica de 1907, así como de cada una de las iglesias que forman el Patrimonio Mundial. Sus tallas románicas, se guardan también en el museo de Barcelona. Son cuatro tallas que pertenecieron a un Descendimiento y que se han catalogado como de la escuela de Erill-la-Vall así como también un frontal de altar pintado, del siglo XIII, dedicado a San Pedro.
Las pinturas se divide en dos niveles de representación: los santos o bienaventurados, que ocupan la mayor parte de los muros y representan el universo celestial; y los animales del bestiario, criaturas que pueblan el mundo terrenal, que se representan en escenas significativamente situadas debajo de los anteriores, como la parte baja de los muros o los intradoses de los arcos.
![]() |
Santo con nimbo. |
![]() |
Parte baja del lienzo. |
![]() |
Intradós de un arco. |
Las pinturas murales de las iglesias cumplían la función de transmitir la moral cristiana del momento mediante conductas a seguir. Los bestiarios servían para transmitir estas ideas. Los frescos hacen una función explicativa y moralizante mostrando así escenas como: La Lapidación de San Esteban
San Esteban está arrodillado y levanta las manos orando, arriba se representa la mano de Dios que con un rayo de luz ilumina al santo, mientras tres personajes le lanzan piedras.
Los tres verdugos están en posturas diferentes para representar el movimiento: el último toma impulso, el del medio se prepara y el primero está lanzando la piedra.
Como es habitual, podemos identificar los personajes negativos porque están representados de perfil, mientras que el santo se muestra de frente, de cara al espectador, y tranquilo a pesar del martirio que soporta gracias a la iluminación divina. Esta escena representa la fortaleza del mártir, como un ejemplo a seguir, las pruebas y las dificultades que han de superar los buenos fieles.
Los juglares: Esta escena en el muro norte representa tres personajes masculinos, un equilibrista del revés que parece querer coger unas espadas con la boca, un malabarista y un músico tocando un arpa.
Su indumentaria corresponde a la de los juglares de la época. Las tres figuras van vestidas con túnicas cortas y con pantalones de forma acampanada atados con unas cintas entrecruzadas.
Esta escena es una representación de la fiesta y la celebración en el universo celestial, de la música y la alegría de la que son partícipes los personajes sagrados, los bienaventurados.
Otra escena nos muestra una pareja de santos o apóstoles conversando, que se identifican como tales por que llevan el nimbo de luz.
Los animales eran representados a menudo con un significado también moralizante en capiteles, libros o, en la pintura mural. El halcón es un ave de caza, mucho más vinculado al mundo cotidiano que al fantástico, considerado el más noble de las aves.
El origen de los bestiarios es el “Physiologus”, un texto del siglo II que ejemplificaba con animales las normas cristianas. Durante más de mil años sirvió de inspiración a teólogos y pintores y se escribieron copias en toda Europa. Muchos de estos animales están presentes en este templo.
![]() |
Pez con cabeza de ave |
Como el elefante:
Representado con cuernos y con unas
orejas muy pequeñas, probablemente porque el pintor nunca había visto un
elefante y su representación no se basa en el conocimiento científico sino en
la repetición de modelos o descripciones de bestiarios anteriores. En los
bestiarios, el elefante se describe como un animal con virtudes positivas,
simbolizando la castidad y la fortaleza.
El león: Es el rey del reino animal y personifica a
Cristo. Los bestiarios explican que cuando nacen las crías de la leona, están
sin vida durante tres días, y es gracias al aliento de león que cobran vida. El
simbolismo del león hace referencia a la resurrección de Cristo.
La pantera: Representada como un cuadrúpedo con una flor
de lis, la pantera se caracteriza en los bestiarios por sus manchas blancas y
negras, simbolizando los ojos de Dios. Se explica que después de comer, la
pantera duerme durante tres días en una cueva y que, al despertar, da un gran
grito que emite un perfume que atrae al resto de animales. El aliento perfumado
simboliza la voz de Cristo que hace llegar su palabra a todas partes.
El osne, mostrándose como un animal cuadrúpedo de aspecto deforme, ya que por sus patas traseras y delanteras y por su pelaje podríamos entender que se trata de un asno, con un rabo de extremada longitud y un estrecho cuello y cabeza. Por otra parte y atendiendo a su pluralidad simbólica, este monstruo se encuentra íntimamente relacionado con las fuerzas demoníacas. Estas fuerzas lo vinculan estrechamente con la noche, ya que se considera que cuando este animal rebuzna en las noches de equinoccio, es la imagen de demonio, pudiendo ser éste un significado más que acertado si nos detenemos en los signos que rodean a este animal. Junto a éste vemos la unión de unas pequeñas líneas con la intención de formar estrellas, pudiendo éstas contextualizar al animal con la noche -todos los animales que se representan en la iconografía de estos arcos tienen el trazado de estos signos que nos llevan a una noche estrellada, pudiendo estar estos animales vinculados con algún rito nocturno-. Pero en oposición a este último, no podemos olvidar otro significado, su vinculación con sus virtudes ascéticas (castidad, humildad).
El carcoliti era un animal hibrido del bestiario medieval, un perro con patas de cabra.
El camello: Simboliza la humildad y la obediencia. El
camello es un animal utilizado durante la edad media para el transporte de las
mercancías, y por el hecho de arrodillarse para poder ser cargado se identifica
con ser servicial.
El pecador: En el intradós de uno de los arcos aparece representada una figura humana con una prótesis en la pierna izquierda y haciendo el gesto de tocarse el sexo Por su situación dentro de la iglesia, este personaje forma parte del registro donde se representan las criaturas terrenales, y presenta una clara función moralizante, su actitud obscena y sus problemas físicos representan sus defectos morales. Este personaje en época posterior, ha sido censurado, se le han decapando sus genitales, y así aparecen en la actualidad.
Cerrando el repertorio, como vimos anteriormente, en el muro occidental habría representado el Juicio Final del que solo se conservan algunas escenas.
![]() |
Juicio final; hidras de siete cabezas |
Ya por último, mirando hacia el exterior, en el cerro donde antaño se alzaba un castillo, se observa el monumento
al pastor. Homenaje que se elogia con la Feria del Queso de Pastor de
Taüll, evento anual que se celebra a finales de agosto; el queso es elaborado a
partir de la leche del propio rebaño pastado en el territorio.
TODA LA INFORMACIÓN INCLUIDA EN ESTA PUBLICACIÓN HA SIDO RECOGIDA DE LOS SIGUIENTES ENLACES:
https://www.arteguias.com/iglesia/santjoanboi.htm
http://www.arquivoltas.com/7-Lerida/01-Boi1.htm
https://es.wikipedia.org/wiki/Iglesia_de_San_Juan_(Boh%C3%AD)
http://www.jdiezarnal.com/elvalledeboisantjoandeboi.html
https://revistascientificas.us.es/index.php/LAB-ARTE/article/download/22085/19481?inline=1
https://www.centreromanic.com/es/iglesia/sant-joan-de-boi/
VISITA OTROS SORPRENDENTES LUGARES DE LA PROVINCIA DE LLEIDA EN EL ENLACE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario